Una semana en Manila

Una semana en ManilaUna semana en Manila da para muchas cosas o para pocas. Todo depende de según el clima y con quien se junte uno. Yo tenía en mente visitar varios sitios pero al final no fue posible. Me dediqué más a trabajar y ver películas que a visitar. No me arrepiento, aunque me habría gustado que fuese de otra forma.

Llegué el 26 de agosto a Manila y me fui el 4 de septiembre. En esos días lo único que realmente tuve oportunidad de visitar fue Intramuros. Esa visita la comentaré en otra entrada, más adelante. Entre unas cosas y otras, pasé el tiempo en el apartamento. Nunca tuve buen tiempo salvo el día que fui al centro de la ciudad. Con el calor apetecía poco salir, pero con lluvia mucho menos.

Espero y deseo tener más oportunidades en el futuro de visitar Luzón. Pero como decía antes, no me arrepiento de nada. Pude descansar, que también me venía bien para lo que faltaba. Limpié la ropa a mano, toda una experiencia. Volví a cocinar como hice en su día en Santo Domingo.

Hubo una noche que vi un espectáculo en el Shangri-La Plaza. El grupo Drum Tao hacía un espectáculo de una hora de duración. Presentaba así una serie de conciertos en Manila. Y la verdad es que me gustó mucho, se lo recomiendo a la gente. Además cené fuera, que me hacía falta romper un poco la rutina.

Básicamente eso es lo que hice durante una semana en Manila. Me quedé sin visitar el monte Pinatubo, el lago Taal o la bahía de Súbic. En el fondo me parece hasta bien. Tengo así una excusa para volver. Y eso sin contar que quiero ver Cebú, Borocay, Siargao y otros sitios. Tan solo queda ahorrar y planificarlo todo con calma.

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