La Poza del Obispo está situada junto al Faro y parque histórico de Arecibo. Se trata de una pequeña poza natural donde la gente se reúne para refrescarse. A pesar de la enorme playa que hay detrás, la gente se decanta por esta poza. La ventaja es que el agua está siempre tranquila, a diferencia de la playa. Hay días donde el viento es demasiado fuerte e impide que podamos colocar una simple sombrilla.
Existe un parking antes de llegar a la playa donde se puede aparcar el coche. Como en tantas otras ocasiones, los lugareños suelen ir allí a pasar el día. Por lo tanto, van con provisiones desde casa para poder comer y beber. Imagino que su popularidad también se debe a la gratuidad de la poza frente al pago de entrada del cercano faro. Una vez hayamos aparcado, tardamos apenas 3 minutos caminando en llegar a la poza. Allí solo queda elegir el sitio en el que vamos a establecernos.
Entre la Poza del Obispo y el faro de Arecibo hay una zona rocosa a la que, creo, merece la pena subir. Desde allí las vistas son increíbles, tanto de la poza y la playa como del Océano Atlántico. Se pueden tomar vídeos y fotos de gran belleza. Eso sí, hay que tener cuidado tanto con el ascenso como con el descenso. No conviene caerse en un lugar así.
La afluencia de gente es especialmente alta los fines de semana. Si queremos pasar allí el día, es aconsejable llegar a buena hora para coger un buen sitio. Entre semana es bastante más apacible y se puede estar más relajado. Se puede ir directamente desde San Juan o después de haber visitado El Observatorio de Arecibo. Así podemos pasar un día completo en esta zona de Puerto Rico.
